Adiós a todo lo que te dijeron que NO DEBES hacer

La educación sexual tradicional ha hablado mucho de lo que debes y lo que no debes hacer, pero dónde queda todo aquello que realmente PUEDES y, de hecho, QUIERES hacer.

«NO te toques ahí»
Photo by Alexander Krivitskiy

Resulta que no puedes tocar tu cuerpo, o peor aún, ni siquiera conocerlo

No sabes cómo se llaman tus órganos sexuales o te da pena nombrarlos correctamente. A que se te ocurren muchas maneras de llamar al PENE. Y, quizá, ni sabías que la VULVA no es la vagina.

«De eso NO se habla»
Photo by Kristina Flour

Las relaciones sexuales existen, pero no te hablan de ellas en casa o en la escuela. Si lo han hecho es para decirte: «no te embaraces» o «no te vayas a infectar», incluso «no lo hagas».

No te explican lo saludable que es el PLACER, no te dicen cuán necesaria es la COMUNICACIÓN ni te mencionan la palabra CONSENTIMIENTO.

«Eso NO está bien»
Photo by Elvin Ruiz

Hay una eterna batalla entre lo bueno y lo malo en la sexualidad: prácticas, identidades, orientaciones, gustos, ¡hasta personas!

No te ayudan a comprender que la DIVERSIDAD aplica a todo y te sientes culpable por tener fantasías, deseos, necesidades y experiencias sexuales.

Photo by Artem Labunsky

Se te antoja eso que te prohibieron, a veces hasta lo disfrutas, pero lo escondes y lo experimentas con culpa, tristeza, enojo… ¡O te quedas con las ganas! Solo si tienes información objetiva, conoces tus derechos y desafías todos los DEBERÍAS que siempre te han dicho, podrás vivir una sexualidad libre, saludable y placentera.

¡La malicia nunca fue tan buena!
Photo by Dainis Graveris
Malicia Sexual

Para que todas las personas puedan explorar y disfrutar su sexualidad, desafiando lo que siempre les han dicho que está mal o, peor, les han prohibido.

La (maliciosa) mente

Soy Mali Mejía, comunicóloga y psicóloga mexicana, dedicada a la educación sexual. Canto feo, bailo mucho y me apasiona la naturaleza.

Ponte… en contacto
  • Escríbeme a maliciasexual.org@gmail.com
    («org» por los «orgasmos» que vas a tener con un poquito más de malicia).